ALGO POR ALLÁ


Si tienen curiosidad...je je..algo por ahí sobre el desparpajo: en el Periódico La Razón de México.

Por Carlos Olivares Baró...caballero!



Todo el texto aquí: La Razón de México.

FRÁGIL. NO TOCAR















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DETALLES













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VISTA COMPLETA




En:

"Formas de Violencia"
Exposición Colectiva

Galería: "La Tenería"
Calle Madero #626 (Junto al Expiatorio)
León, Gto.

FUI, VINE Y VOLVÍ



Una tras otra una tras otra una tras otra una tras otra.


Las olas.


Oye...

LO QUE SIGUE


La página de la conversación se supone que cierra. Pero se levanta. Y entonces mojamos las yemas. Yermas yemas de los dedos.

Cómo estás?

Saldremos a pasear dentro de un rato junto a un dios.

Besaré al dios y voy a permitirle tocar mis pies con su lengua.

UN FANDANGUILLO


No sé cómo empezar. Pero ¡en qué casa la vida no es un desastre? Estoy pensando en el muerto que ayer apareció con el cuello quebrado dentro de un carro una cuadra afuera de mi casa. Pero también estoy pensando en la película-puesta en escena chilena que ayer en Guanajuato vieron mis padres. Las pupilas de mis padres. Estoy escuchando las palabras de alguien detrás de un aguacero. Estoy viendo con el rabillo del ojo (de soslayo) la maravilla de cabello rojorayado de Huth, Tabea, mi amiga. Veo la espalda de Cris Kristopherson-personae mi más amiga. Y veo y escucho que los pájaros llegan en tropel: Invernadero. La vida es. Y por eso.

Suspiro. Y pongo las manos sobre el texto. ¿Sobre el sexo? Soy toda literal. Lateral. Litoral. El pensar brinca sobre mi pelo. Aaaah el cabello. Y es estar feliz cuando dan las ganas. Y cuando me acuerdo del sonrojo en las chapas, que no mejillas, del amado de mi más amiga mientras él succiona con un popote una margarita. André se queda corto, eh? Yo nada más me acuerdo que avizorar es el ojo del pájaro. Y olas enormes rompiendo como cuando ayer, mi más amiga, las tocamos con nuestra mano de alambre y la risa.

Cómo se dice amar? Se dice amar como cuando estas mañanas y estas tardes estábamos reunidas las que habíamos leído a Judith Butler, a Pizarnik. Y ahora ya no. Así se dice amar. Te acuerdas? Pero leímos.

Respiramos y cae la lágrima sobre la mejilla. Y el proceso es amplio. Pero pienso en el muerto afuera de la casa y en el sonrojo de él y en la espalda de ella y en los locos de Campo Alaska que me contaron a gritos de sus virtudes. Las de ellos, los que estaban sujetos a una argolla mientras veían la luz del sol pasar a través de los barrotes. Los derviches danzando, girando hacia arriba: una conversación. Una matica, un manojito de ruda. Pero el romero. Y el romeo con sus expedientes.

Quiero decirte signo de admiración cuando saludas, que me places. Es que es tan (n)obvio.

Y luego? Luego vienen las horas consecutivas, y la mirada abierta y los oboes. Pero estaba sentada junto a mi madre cuando escuché el sonido único del correr de los telones. Todo esto para decirte que me places. Sólo somos un cordón umbilical.

Escribir y el desparpajo es la rompiente de las olas.

Y no paro.

CORDIALMENTE INVITADOS






El viernes 16 de octubre, en León, Guanajuato. A eso de las 7:00 pm!

y también,

para usar el don de la ubicuidad que tanto me place,

acá en Tijuana,
a las 7:00 pm también, lectura en Nortestación.

Ahí, en los dos no-lugares nos wachamos!

EX
HALO
IN HALO
EX
HALO IN HALO


# Angulosos cambios, esquinas, disrupciones, corredizos rodeos (perambular objetos, acariciar dragones), arenas donde encar(n)ar el deseo, voluntad de más espacios liberados. Además, ese trasfondo, suscitativo del punto crítico (crítica aplicada a la denotación), aspecto que no coagula, en vasto espectro: la constante de la violencia. Y ésta en tanto presión, mantenimiento de la feracidad ambiente, latinoamericana; alucinación colectiva, por todos los medios disponibles inducida desde el poder autoritario, cotidianamente reafirmada como si fuese condición ineludible. Es, desde semejante peso, pero también desde tal claridad, en cuanto a urgencias éticas, que Amaranta Caballero Prado ventila causas, no perdidas, sino muy pendientes. Pero más que denunciarla, en su poesía, no es la violencia mero tópico a disponer en un trino, como si de una pasión inherente se tratase, o de un vicio inveterado, apartado y trinchado, flor carnívora que ya no resultase amenazante, a salvo bajo la mira, adorno ideológico para el rincón sedentario. Amaranta parte de saber que tener que decir ya es violencia, proviene en parte de ahí, da parte de violencia. Pero, también, que poder decir, incluso manifestar discordia, reabsorbe cierta carga “negativa” en el lenguaje, si éste se hace afluencia expresiva de una posibilidad. En cuanto indagación de la calidad energética en lo verbal, primer paso al costado de la violencia, ir despegando la palabra de la violencia residual, y ya en el matiz, respiratorio, de la sílaba. Decir, según determinados tratamientos para ese despegue, puede remover, en la lectura y por un instante, aquel mandato, en definitiva suicidario, de la violencia en tanto índole intratable, precondición.

*

Parte del texto que escribió Reynaldo Jiménez acerca de mi trabajo y la escritura.
Aparece en la antología "Nosotros que nos queremos tanto" editada por El Billar de Lucrecia. Si usted gusta leer el ensayo completo, vaya a: MMMM. El blog de Reynaldo Jiménez.

UNAROSAESUNAROSAESUNAROSAESUNAROSA



Cápsula+Pastilla+Gragea+Píldora: una rosa.

LO QUE TE CONTÉ MIENTRAS TE HACÍAS LA DORMIDA



Que hubo música junto al mar, y eso que ni la pedí.
Que hubo luna esperando hasta que cerrara sola la puerta del garage.
Que hubo risa para decir como siempre lo que importa y lo que no tanto pero sí.
Que esta casa: Tu casa.
Que este sitio lleno de luz y las libélulas en performance patas arriba la noche de antier.
Pero las velas.
Una celebración.
La risa entera y completa: esa carcajada feliz.
Pero también ahora el peso único del mundo
y sus olas de futuro.
Lo cúmulos.
Un espacio donde otra vez como hace años.
Siempre sólo únicas las felicidades.

ps: Feliz cumpleeeeee!